Blog MundoMayor

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Durante la menopausia y después de ésta la mujer pierde una de sus mejores armas contra la desmineralización y densidad de su sistema esquelético. La mejor forma de evitarlo o atenuar el proceso es con ejercicio.

Pero la pregunta que surge es: ¿cuánto ejercicio y qué tipo de ejercicio?

El pasado año 2019 se llevó a cabo un estudio cuyo objetivo fue examinar los efectos de la prescripción de diferentes volúmenes de ejercicio sobre la densidad mineral ósea y contenido óseo en mujeres posmenopáusicas, previamente inactivas. Se realizó una intervención de 12 meses, con un control de un año después de la intervención.

Fueron seleccionadas cuatrocientas mujeres para dicho estudio, que fueron asignadas aleatoriamente a dos grupos de trabajo:

  1. Realizar 150 min/semana (grupo MOD) de ejercicio cardiovascular.
  2. Realizar 300 min/semana (grupo HIGH) de ejercicio cardiovascular.

Los resultados mostraron que a los 12 meses la densidad mineral ósea en el grupo HIGH fue mayor que en el grupo MOD (0.006 g/cm2 ;95% CI: 0.001 ? 0.010; p=0.02).

A los 24 meses la diferencia entre grupo indicó mayor densidad mineral ósea en el grupo HIGH (0.007 g/cm2 ; 0.001-0.001; p=0.04). No se observaron diferencias entre grupos en el contenido mineral óseo.

La clave está en la diferencia entre contenido y densidad ósea. Un hueso con mayor densidad es siempre un hueso más fuerte y resistente.

En un análisis adicional se observó que las mujeres que completaron más minutos/semana de ejercicios de impacto tuvieron mayores niveles de densidad mineral ósea a los 12 meses, en comparación con el inicio del programa (0.006 g/cm2 , 95% CI: 0.006 ? 0.012; p=0.03).

La conclusión de este estudio viene a demostrar que mayores volúmenes de ejercicio, especialmente de impacto, llevan a un menor declive en la densidad mineral ósea, algo que se mantiene al menos un año después de la intervención.

No cabe duda que, con independencia de la medicación que pueda prescribir el facultativo médico, la realización de un ejercicio de impacto de intensidad moderada, es la mejor receta, si no para recuperar densidad mineral ósea en todos los casos, sí para conservar la que se posee.

Ref.:

fisiologiaclinicadelejercicio.es ? J.L. Chicharro

Gonzalo-Encabo y col, 2019; Scand J Med Sci Sports 29-abr; doi: 10.1111/sms.13443