Vamos a echar un vistazo, valga la redundancia, a la anatomía de un ojo, para situarnos.
Como puedes observar, se trata de un órgano bastante complejo, formado por un montón de elementos, algunos de ellos realmente diminutos.
Como cualquier parte de nuestro organismo está expuesto a sufrir patologías. Alteraciones o enfermedades de mayor o menor entidad, que deterioran su correcto funcionamiento. Algunas muy habituales y poco importantes como miopía, hipermetropía, presbicia, astigmatismo, y otras realmente incapacitantes como desprendimiento de retina, afectación del nervio óptico o la que vamos a ver hoy, las cataratas.
Qué son las cataratas
Las cataratas son unos parches blanquecinos o nublados que se desarrollan en el cristalino del ojo (ahora ya sabes situarlo) y provocan una visión borrosa o nublada. Son la causa más común de discapacidad visual en todo el mundo.
Se pueden desarrollar en cualquiera de los dos cristalinos, o en ambos al mismo tiempo.
El cristalino, como su propio nombre indica, debe ser totalmente transparente para que la luz pase a través de éste y llegue a la retina, a través de la cual también ha de pasar, para conformar la imagen que estamos mirando. Si el cristalino, como el cristal de una ventana, está tamizado por una ?cortina?, la luz que pasará a su través será menor. En el humano eso se traducirá en una visión cada vez más borrosa y limitada.
Qué causa las cataratas
La etiología de las cataratas (su causa u origen) es diversa:
- Relacionadas con la edad. Son el tipo más común. A medida que las personas envejecen, las proteínas dentro del cristalino comienzan a cambiar, lo que puede hacer que se desarrollen manchas turbias. Los investigadores creen que esto puede deberse a que los cambios en las proteínas alteran la forma en que los líquidos y los nutrientes llegan al ojo.
- Congénitas. Los bebés a veces nacen con cataratas como resultado de una infección, lesión o desarrollo deficiente antes de nacer. También pueden desarrollarse durante la niñez. Las personas con familiares que han tenido cataratas tienen un mayor riesgo de desarrollarlas.
- Secundarias. Se desarrollan como resultado de otras patologías, como diabetes, exposición a sustancias tóxicas, ciertos medicamentos (como corticosteroides o diuréticos. La ingesta a largo plazo del fármaco ezetimiba para reducir el colesterol, también aumenta el riesgo de cataratas), luz ultravioleta o radiación. En este sentido, la exposición prolongada a la luz solar brillante y la radiación ultravioleta, se ha relacionado con el desarrollo de cataratas en personas que trabajan al aire libre sin usar equipo protector para los ojos.
- Diabetes. Las personas con diabetes tienen casi el doble de probabilidades de desarrollar cataratas que las que tienen el índice de glucosa normalizado.
- Traumatismo. Un impacto en el ojo puede desembocar en el desarrollo de una catarata.
Síntomas
Ya hemos dicho que una visión que empieza a ser turbia o borrosa es un indicador posible de desarrollo de cataratas. Pero hay otros:
- Colores que pierden su luminosidad. Nos parecemos más atenuados.
- Destellos. Los faros, lámparas o la luz del sol pueden parecer demasiado brillantes. Puede aparecer un halo alrededor de las luces.
- Mala visión nocturna.
- Visión multiplicada de un objeto (visión doble, triple, etc.), que suele ir desapareciendo en la medida que la catarata se hace de mayor tamaño.
- Necesidad demasiado frecuente de adaptar la lente de las gafas. Lo que familiarmente llamamos graduación de la vista.
Clasificación
En función del lugar donde se forman, pueden clasificarse de la siguiente manera:
- Catarata cortical anterior.
- Catarata cortical posterior.
- Catarata polar anterior.
- Catarata polar posterior.
- Catarata subcapsular anterior.
- Catarata subcapsular posterior.
Y ya hemos visto cómo lo hacen en función de la causa que las origina.
Evolución
Normalmente las cataratas continuarán empeorando con el tiempo, pudiendo incluso causar ceguera total si no se tratan adecuadamente por un especialista.
Pueden queratinizarse (volverse más duras), lo que complicaría bastante el procedimiento quirúrgico.
Prevención
Algunas de las medidas que te vamos a detallar seguidamente son, en general, prácticas saludables en cualquier contexto, pero en el caso que nos ocupa hay que tenerlas más en cuenta aún.
- Usar gafas de sol para reducir el impacto de los rayos UVB (ultravioletas) sobre los ojos. Cualquier gafa ?de mercadillo? no vale. De hecho, podría ser peor el remedio que la enfermedad, como reza el dicho. Siempre que compres gafas, hazlo en establecimientos debidamente acreditados.
- Revisar tu visión de forma regular. Si empiezas a notar algún tipo de molestia en tu visión, es hora de acudir a tu oftalmólogo u oculista. No deteriores un sentido tan gratificante por desidia o pereza.
- No fumar.
- Incrementar los antioxidantes en tu dieta. Vitaminas. Frutas y verduras frescas.
- Cuidadar el sobrepeso y su eventual compañera de viaje, la Diabetes. Ya sabes que ésta aumenta significativamente la posibilidad de desarrollar cataratas.
Diagnóstico
Será el oftalmólogo quien, a través de un examen completo de tu ojo, determinará si tienes o no cataratas, o comienzas a tenerlas.
Recuerda que una cosa es el órgano de la visión (ojo o globo ocular) y otra la función que desarrolla éste, que es utilizar sus componentes para que tu cerebro interprete lo que estás viendo, en forma de imagen. De esto puede que hablemos otro día.
Es decir, que hablar del ojo y de la vista no es lo mismo. Por eso un oftalmólogo y un/a optometrista u oculista, no son ?equivalentes?. De las patologías oculares se encarga la oftalmología.
Vamos con las pruebas:
- Prueba de agudeza visual. Igual o parecida a la que llevaría a cabo un/a oculista.
- Examen de con pupilas dilatadas. El médico dilata las pupilas para tener acceso a la parte posterior de tu ojo, y poder examinarlo. Retina y nervio óptico, fundamentalmente.
- Tonometría. Con un instrumento se mide la presión dentro del ojo. Si existe más de la debida, hablamos de hipertensión ocular.
- Otras pruebas diagnósticas. En función de lo que el especialista considere adecuado en cada caso, se pueden realizar otras pruebas.
En la imagen podemos ver la vista ampliada de una catarata, observada en el examen con una lámpara de hendidura.
Tratamiento
Suponemos que, al final, lo que realmente importa a la persona afectada es el tratamiento posible y el pronóstico.
Como suele suceder, depende en buena parte del grado de evolución de la patología.
Los síntomas de la catarata temprana se pueden mejorar con gafas nuevas adaptadas a la condición de la persona, iluminación más brillante, gafas de sol antirreflejos o lentes de aumento. Si estas medidas no ayudan, la cirugía es el único tratamiento eficaz.
La cirugía implica retirar el cristalino opaco y reemplazarlo por un cristalino artificial.
Referencias:
Wiki commons
Provisu.ch
News-Medical Life Sciences